por Daniel Gangarossa
-"¡Sos un maldito optimista!"
Me gritó indignada una compañera, la mañana de lluvia torrencial en la que llegué silbando al trabajo.
-"¡Sos un maldito optimista! ¿Cómo podes estar contento, teniendo que venir a trabajar y encima con un día tan horrible..?"
Ella creía que yo tenía simplemente una visión positiva del mundo, que sólo apreciaba lo bueno, lo favorable, lo conveniente y no daba lugar a nada negativo.
Que pensaba que el futuro iba a ser mejor sí o sí. Pero ella estaba equivocada:
Vivo el presente y espero el mañana tranquilo, porque se que Dios tiene un propósito para mi vida. Todo lo que me pasa es porque Él lo permite y que el resultado será para mi bien.
Si no lo creyera, claro que estaría asustado, confundido, temiendo como va a terminar todo esto.
Pero no, Dios le dio sentido a mi vida. Se quién soy, de dónde vengo, para qué estoy acá y hacia dónde voy.
No es optimismo ni actitud positiva.
Es fe en Dios.
"Yo confío en que veré la generosa voluntad y el amor inagotable del Señor mientras estoy acá, en la tierra".
Salmos 27:13
תגובות