Carla Perata
“¡En marzo arranco con el gym!”
“¡Tengo que estudiar inglés, mañana llamo y averiguo!”
“¡Tendría que ir al dentista, el mes que viene!”
“¡El lunes arranco con la dieta!”
“¡El año que viene, cuando me organice me voy de viaje!”
“¡Tengo un sueño, un emprendimiento, pero todavía no es el momento!”
¿Te suenan estas frases? a mi sí.
Solo me voy a detener en contarte lo que Dios hizo en mi cuerpo por dentro y por fuera hace 2 años cuando me DETERMINÉ.
Llegue a tocar fondo. El peso se me fue de las manos, con 42 años y toda una vida de sobrepeso y de bajar y subir como un yoyo, llegue a tocar fondo, pero a veces llegar al fondo te hace salir con más fuerzas.
Decidí dejar mi situación, mi problema, literalmente en las manos de Dios en las manos del que me conoce mejor que nadie.
Dejé de tener el control de mi cuerpo, de lo que comía, de lo que escondía, de lo que guardaba y sabes que, deje que Dios como un papá lleno de amor, me agarrara de la mano fuerte y me acompañara a transitar un camino nuevo. Ese camino al que estaba negada, y al que nunca vi como una opción.
Comencé un proceso que duro varios meses, en el que no me fue fácil encontrarme con Carla, la que estaba escondida. Hasta que llegó el momento de entrar al quirófano y te cuento que fue glorioso, la paz que el Señor me dio fue impresionante, y lo que vino después fue aún mejor.
Este proceso me llevó a 40 días de ayuno, si, literal 40 días de ayuno y oración, una experiencia sobrenatural y única. Dios me sano en lo profundo.
Ya pasaron 2 años y medio, varios kilos bajados y una nueva Carla.
Dios es un Dios integral, te digo esto porque no solo cambio mi vida, sino mi relación con los demás, con mi familia, con mi esposo, con mi trabajo, porque Dios cuando toca un aérea de tu vida, todo se transforma, todo lo que está a tu alrededor es salpicado, es cambiado, es restaurado y sanado.
Este es mi versículo guía y hoy te lo regalo:
“Determinaras asimismo una cosa, te será firme, y sobre tus caminos resplandecerá luz”. Job 22:28, RVR 1960.
No esperes al lunes, a la semana que vine, al año que viene, ¡hoy puede ser el primer día!
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